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¿Puedo tener un ajolote como animal de compañía?

Los ajolotes (Ambystoma mexicanum) son anfibios endémicos de la Ciudad de México, es decir que solamente se encuentran en esta zona. Son miembros de la familia de las Salamandras y a diferencia del resto de los anfibios y salamandras, no presenta una metamorfosis, quedándose en su estado de “larva”, esta característica se conoce como “neotenia”. En este estado llegan a su madurez sexual y pueden reproducirse sin perder sus características físicas.

Permanece en el agua toda su vida tomando oxígeno del agua a través de sus branquias y su piel, pero también salen a tomar aire a la superficie. Miden entre 25 y 30 cm y las hembras suelen ser más grandes y robustas que los machos. Tienen diferentes colores negro, gris, aperlado, atigrado de tono verdoso o gris y de color blanco.

¿Sabías que?

Aunque no lo creas...
Los ajolotes son capaces de regenerar todas las partes de su cuerpo, incluido el sistema nervioso.

Consideraciones a tener en cuenta

Son animales que se encuentran en peligro de extinción debido a la pérdida de su hábitat natural. Pero, gracias a su popularidad en estudios de investigación y como animal de compañía, se crían en cautiverio para su venta. Se encuentran en la lista de Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres, el cual regula el comercio de especies de animales y plantas silvestres, y busca evitar que su venta sea una amenaza para su supervivencia.

Su venta ilegal es uno de los factores que contribuyó a que actualmente estén en peligro de extinción, si deseas tener un ajolote como animal de compañía debes comprarlo en lugares donde su venta sea legal. Estos lugares son conocidos como Unidades de Manejo para la Conservación y Aprovechamiento para la Vida Silvestre (UMA), los cuales están aprobados por la SEMARNAT. Es importante mencionarte que al igual que todos los animales de vida silvestre, NUNCA debes alejarlos de su hábitat natural.

¿Cómo escoger a tu ajolote?

¿Qué tipo de hábitat y agua necesita?

Debes considerar el tamaño y etapa de vida de tu ajolote para proporcionarles el espacio necesario para que pueda desplazarse libremente
Al igual que todos los organismos acuáticos, la calidad del agua es muy importante para el bienestar de tu ajolote. Los parámetros fisicoquímicos que debes evaluar son pH, nitritos, nitratos, amoniaco, cloro, dureza, temperatura y oxígeno disuelto. En la siguiente tabla encontrarás los niveles adecuados de estos parámetros para el agua de tu ajolote.
El agua de grifo es la más adecuada para llenar tu acuario, aunque un problema que tiene es sus altos niveles de cloro. Para controlar los niveles de estos parámetros puedes utilizar los acondicionadores de acuario que vendemos en Petco.

Los ajolotes viven en aguas con poco movimiento, por lo que su acuario debe ser de al menos 40 litros, el largo debe ser de aproximadamente 70-100 cm y de por lo menos 15 cm de profundidad. Requieren de un filtro que tenga un flujo suave y que tenga carbón activado y filtrado biológico para disminuir los niveles de nitrógeno. La temperatura del agua debe estar entre 10 y 20 °C y debes realizar los recambios de agua parciales cada 15 días, aspirando principalmente el fondo del acuario.

Puedes colocar plantas que vivan con poca luz o que floten, ya que a los ajolotes les gustan los ambientes sombreados. También, coloca adornos o plantas en medio del acuario para que nade alrededor. Utiliza sustrato ligeramente grande para evitar que lo ingiera cuando busque alimento al fondo del acuario.

Recuerda que antes de meter a tu ajolote a su nuevo hábitat debes realizar el ciclado del agua, para que el ciclo del nitrógeno comience a formarse.

¿Con qué se deben alimentar?

Los ajolotes son carnívoros estrictos, pero su dieta puede variar de acuerdo a su etapa de vida.

A los juveniles y adultos debes alimentarlos entre 2 y 4 veces a la semana y su dieta debe ser variada para que tenga una buena nutrición. Su alimento puede estar vivo o muerto. Sin embargo, el movimiento de su presa es un gran estímulo para que empiece a comer. Por el tamaño de su boca y como no mastica, solo puede ingerir alimentos que quepan en su boca enteros. A continuación, te damos algunas opciones de alimento.

Algunos alimentos que les puedes dar son:
  • Alimentos balanceados para anfibios, aunque en muchos casos no lo aceptan
  • Larvas de mosquito
  • Gusanos de sangre
  • Tenebrios (no se recomienda todos los días, porque su cubierta es difícil de digerir)
  • Pequeños crustáceos y peces
  • Pequeños cortes de carne de pollo, pescado o res

En general comen poco, así que debes retirar todo lo que no se haya comido y esperar a que su abdomen haya recuperado su tamaño habitual antes de que lo vuelvas a alimentar.

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