Todo lo que necesitas saber sobre la exposición al sol y tu mascota
Al igual que nosotros, tu mascota también debe tener cuidado con el exceso de sol, ya que una exposición excesiva a los rayos solares en los animales puede provocar afecciones como insolación, quemaduras solares o hasta cáncer de piel. Afortunadamente, hay formas de proteger a tu gato y perro de estos problemas mientras siguen disfrutando del sol juntos.
A continuación, descubre los peligros de la exposición al sol y algunas medidas preventivas que puedes tomar para mantener a tu mascota a salvo.
Peligros de los rayos solares
Si tu mascota pasa demasiado tiempo al sol, puede correr el riesgo de sufrir las siguientes afecciones:
Cuando los animales sufren de mucho calor, su temperatura corporal se eleva por encima de lo normal, lo que puede hacer que varios sistemas orgánicos se apaguen, llegando a ser muy peligroso y mortal. Los signos iniciales de un golpe de calor suelen ser el jadeo excesivo y la reticencia a caminar, pero en los casos más graves puede haber colapso, debilidad, pérdida de conciencia, vómitos/diarrea, convulsiones y encías rojas, azules o grises.
La pérdida de líquidos y la falta de acceso a suficiente agua para reponerlos provoca deshidratación en humanos y animales. Los signos que reflejan la deshidratación en las mascotas son los ojos hundidos, encías pegajosas y pálidas, letargo, debilidad y el tiempo prolongado que tarda la piel en volver a su posición normal cuando se la pellizca ligeramente hacia arriba, mayor a 3 segundos.
Por ponerte un ejemplo, un gato blanco de interior que duerme todo el día en la ventana podría correr el mismo riesgo que uno que sale al exterior. En los perros, las zonas más afectadas son la parte superior del hocico y la parte inferior del vientre. En los gatos, las quemaduras solares suelen afectar a las puntas de las orejas, aunque también pueden aparecer en la cara.
¿Las mascotas pueden sufrir de cáncer en la piel?
Al igual que las personas, los animales también pueden sufrir quemaduras solares, y el riesgo de sufrirlas es mayor si pasan mucho tiempo bajo la luz directa del sol o salen a pasear en las horas de mayor intensidad solar, sobre todo en las zonas de gran altitud, donde la intensidad del sol es mayor. Las quemaduras solares suelen afectar mayormente a los animales de piel y pelo blanco o de pelo claro, los animales sin pelo o los que sufren afecciones dermatológicas.
La exposición excesiva al sol también puede provocar cáncer de piel en los animales de compañía, concretamente tumores de las células de la piel y tumores de los vasos sanguíneos que residen en la piel. Estos tumores se presentan de forma más común en las orejas, la nariz, el tercer parpado y alrededor de los ojos.
En general, existen dos factores importantes que aumentan el riesgo de que un perro o un gato sufra quemaduras solares y, por tanto, cáncer de piel, y estos son tener el pelo y la piel claros y el grado de exposición a la luz solar directa. Algunas razas comunes que llegan a sufrir con el sol son los Pitbulls, Dálmatas, Bull Terriers, Xoloitzcuintle, los gatos siameses y los gatos esfinge. Sin embargo, cualquier perro o gato puede desarrollar un tumor cutáneo inducido por los rayos solares.
Desgraciadamente, es imposible saber si una lesión es cancerosa o no con solo mirarla. La mejor que se puede hacer es que un veterinario evalúe cualquier bulto, protuberancia o lesión que encuentres anormal. Los tumores de la piel pueden varían en tamaño y forma, llegando a parecer placas planas o úlceras que están elevadas, rojas e irritadas. Los tumores de los vasos sanguíneos pueden aparecer como lesiones parecidas a «ampollas de sangre» conocidas como hemangiomas. Estos hemangiomas pueden empeorar y convertirse en tumores cancerosos conocidos como hemangiosarcomas.
¿Cómo proteger a tu mascota del sol?
Ten en cuenta los siguientes consejos para evitar que tu mascota sufra los efectos de una exposición excesiva a los rayos solares.
Considera la posibilidad de usar ropa
Conoce a tu masota
Evita el sol durante las horas más pesadas
Tip Petco. La regla de 5 segundos puede ayudarte a saber si el piso está muy caliente para tu mejor amigo. Pon tu mano en el suelo por 5 segundos, del lado contrario de la palma y si lo sientes muy caliente, el piso esta muy caliente para tu pequeño y no se recomienda que lo toque.
Utiliza protector solar
Utiliza filtros que bloqueen los rayos UV en ventanas y puertas
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